Gil Rosiña afirma que la Junta acompañará a las empresas extremeñas a impulsar los planes de igualdad para acabar con la brecha de género

La consejera de Igualdad y portavoz de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña, ha destacado este miércoles que la Junta de Extremadura acompañará a las empresas extremeñas “a poner en marcha planes de igualdad para acabar con la brecha de género”.

Asimismo, ha instado a “ser capaces de incorporar, sin miedo ni complejos, al discurso de la empresa la revolución feminista”

En este sentido, ha asegurado que “la revolución feminista, que es la revolución de la igualdad para traer cosas justas”, también tiene que estar en las empresas para que éstas tengan un mejor posicionamiento de la marca, una mejor cuenta de resultados y una mayor creación de empleo, “todo ello en igualdad de condiciones”, ha aseverado.

Durante su intervención, Gil Rosiña ha recordado que todas las revoluciones han traído consigo “avances y cambios positivos” y ha señalado que “aquellos países que tienen políticas de igualdad que posicionan a mujeres y hombres en igualdad de condiciones en el acceso a todos los servicios tienen un mejor Producto Interior Bruto”.

LA IGUALDAD COMO RESPONSABILIDAD COMPARTIDA

Además, ha insistido en que la igualdad es una responsabilidad compartida y los poderes públicos tienen que tener la responsabilidad de hacer cumplir las políticas públicas en esta materia.

Asimismo, ha advertido que la brecha de género es una realidad que se da tanto en el ámbito público como en la empresa privada y, además, ha incidido en que es en este momento cuando se da la oportunidad de acabar con estas desigualdades a través de las instituciones públicas y el ámbito privado.

Por último, la titular de las políticas de Igualdad y portavoz ha recordado que el Ejecutivo regional firmó hace unos meses el Pacto por la Igualdad de Extremadura desde el ámbito de la concertación social, con el objetivo de “mejorar la vida del conjunto de la sociedad, en especial de las mujeres”, para situarlas en igualdad de condiciones en el acceso al mercado de trabajo y también en el sector empresarial, respecto al género masculino.