Extremadura es la Comunidad con más agua dulce del país
Muchos piensan que Extremadura es seca, árida y calurosa, sobre el calor es cierto, lideran las máximas temperaturas en verano, pero ni es seca ni es árida, es la Comunidad con más agua dulce del país y la primera en conseguir una Bandera Azul para una plata del Interior.
Extremadura es el pulmón de España y de Europa, sus espacios naturales albergan una flora y fauna singular más de 1.500 kilómetros de costa interior y 52 zonas de baño naturales.
Extremadura es destino para el descanso, ya el emperador Carlos I de España y V de Alemania lo tuvo claro y lo convirtió en retiro real en 1557 para descansar sus últimos años aquejado de gota, un lugar idílico con un clima perfecto para retirarse y descansar.

La comarca de la Vera es verde, agua y vida, sus gargantas caudalosas, pozas naturales formadas entre piedras, granito y piscinas naturales la convierten en un paraíso para aplacar los efectos del calor. Una zona también conocida por la elaboración del típico Pimentón de la Vera, inmerso dentro del paisaje y gastronomía.

Entre La Vera y el Jerte se encuentra Piornal, el punto más alto de toda la orografía Extremadura, conocido por el Jarramplas, se convierte en una ruta a través de su puerto por la que disfrutar de unos paisajes únicos conectando ambas comarcas.

Visitar el Jerte es siempre un espectáculo, en otoño e invierno con sus castaños, primavera con el cerezo en flor (espectáculo único en el mundo) y en verano es de obligada visita a la Reserva Natural de la Garganta de los Infiernos para zambullirse en los pilones.

Del Jerte a Hervás, su judería representa al Valle del Ambroz declarado conjunto histórico-artístico, uno de los mejor conservados de la Red de Juderías de España. El Ambroz y Hervás representan el otoño mágico, pero antes de la caída de las hojas se convierte en una parada entre pozas y gargantas para disfrutar de la gastronomía fronteriza entre Salmantina-Cacereña.

Las Urdes y Sierra de Gata han sido las últimas conocidas de este turismo de aguas, mantienen aún más su esencia y su naturaleza, Robledillo de Gata, Descargamaría, Acebo con sus piscinas y playas naturales envuelven a un lugar mágico donde el tiempo se tiene.

San Martín de Trevejo, Trevejo, Eljas y Valverde del Fresno parecen haberse detenido en el tiempo, su A Fala, nos lleva a la frontera cercana con Portugal, y como las fronteras son sólo eso, límites en el mapa porque en los pueblos, sus costumbres se han mezclado creando una identidad propia, el Manegu una lengua romance del subgrupo galaico-portugués que se ha mantenido intacta a lo largo de la historia.

No sólo Cáceres es agua, en la Provincia de Badajoz la playa fluvial de Orellana fue la primera en conseguir una bandera azul, pero también la tiene Cheles. Un paraíso de playas de agua dulce que cada año atraen a más visitantes.

Alqueva se ha convertido en la gran oportunidad de turismo natural de la Provincia de Badajoz, tierra, agua, aves y gastronomía conforman una apuesta única en el mundo y que aún está por descubrir.
