La Asamblea muestra su compromiso con el colectivo de personas con problemas de salud mental y sus familiares

La Asamblea de Extremadura ha mostrado este miércoles, 13 de octubre, su compromiso con el colectivo de personas con problemas de salud mental y sus familiares.

El pleno de la Cámara regional ha aprobado por unanimidad una declaración institucional en la que expresa la voluntad del Parlamento autonómico de impulsar cuantas medidas normativas y reglamentarias sean necesarias para facilitar una mejora de su calidad de vida.

El pasado domingo, 10 de octubre, se conmemoró el Día Mundial de la Salud Mundial, una efeméride cuya finalidad es visibilizar la importancia de la salud mental en la sociedad, favorecer la adoptación de medidas que contribuyan a la recuperación y mejorar de la calidad de vida de las personas con trastorno mental y la de sus familias.

En esta ocasión, el lema elegido ha sido “La salud mental, un derecho necesario. Mañana puedes ser tu” y se ha centrado en la defensa de la salud mental en un mundo desigual, aspecto éste que cobra especial importancia, recoge la declaración institucional, en el contexto de la pandemia provocada por la Covid-19.

UN DERECHO DE TODOS

De este modo, el texto señala que la salud mental es también un derecho de todos y de todas, independientemente de su situación y advierte de que las desigualdades son cada vez más palpables y producen vulneración de derechos, provocando diferencias no solo de acceso a los servicios de atención, sino en la calidad de la salud mental de la población.

La declaración reconoce que se debe dar respuesta a los problemas más complejos a los que se enfrenta este colectivo, como los problemas de adicciones y de salud mental graves, situaciones que precisan un abordaje integral y continuado. Así, apunta que todas las instituciones implicadas en la atención deben dar un paso más para trabajar desde un enfoque comunitario e integral, un modelo basado en la convención de la ONU, de protección a las personas con discapacidad.

“Hay que dar esperanza de solución a estas personas, con una respuesta cálida y de calidad, con profesionales comprometidos, formados e informados”, recoge la declaración, al tiempo que subraya que es preciso tener una sensibilidad especial cuando se trata de mujeres afectadas por problemas de salud mental, víctimas de violencia de género, personas internas en centros penitenciarios, personas con graves adicciones, personas sin hogar, niños y niñas y adolescentes.

Así, aboga por humanizar las unidades de hospitalización y trabajar de manera coordinada para disminuir las desigualdades que generan los problemas de salud mental, al tiempo que apuesta por la realización de campañas de concienciación dirigidas a la población infantil, juvenil y personas mayores y también que contribuyan a erradicar las conductas racistas.